Cuando hacemos grandes compras de alimentos, tenemos que aprender a “guardar la comida” de manera correcta empezando por el frigorífico, el congelador y la despensa. Debemos ir más allá de los consejos típicos de almacenaje e intentar que los alimentos frescos duren más tiempo pero requiera menos esfuerzo.
Actualmente hay que pensar cómo almacenar alimentos siguiendo nuestros hábitos pero a la vez respetando cada alimentos y sus condiciones optimas de almacenaje. Es por eso que hemos creado esta mini serie con Massimo Bottura. Porque ahora, debemos respetar la comida más que nunca.
En el segundo episodio hemos reunido pequeños pero efectivos consejos de Massimo Bottura y otros chefs de Food for Soul que apoyan nuestra causa.
Aquí hay consejos y trucos inspiradores sobre cómo mantener la comida fresca durante más tiempo, disfrutar de deliciosas comidas y convirtiendo el planeta en un lugar mejor.
Pequeños pasos para alargar la vida de tus frutas y verduras.
Las frutas y verduras nunca deben mantenerse juntas. De hecho, muchas frutas liberan gases que aceleran el proceso de maduración de los productos frescos si se colocan juntas.
Para mantener la ensalada siempre crujiente y fresca, coloca las hojas en un tazón o recipiente. Añade un par de hojas de papel de cocina en la parte superior y tápalo bien con papel de plástico para aislar todo el aire posible. Esto evitará que la humedad se asiente en las hojas, ayudándolas a mantenerse frescas y evitar que se marchiten.
El brócoli se debe comer unos días después de la compra porque consume rápidamente oxígeno y azúcar para producir nutrientes útiles para sus propias células. Para alargar su frescura, envuélvelo en papel de aluminio o en un film que lo aísle de la atmósfera, para así, reducir el contacto con el oxígeno.
Para hacer que los tomates duren más tiempo, hay pequeños pasos a seguir. Limpia el tallo de las ramitas y hojas más largas y luego coloca el tomate limpio boca abajo sobre una superficie plana.
¿Plátanos? tan fácil y sencillo como envolverlos con papel film alrededor del tallo, esto evitará la maduración prematura de la fruta. Es mejor almacenar los plátanos por separado y no en un solo racimo ya que ayudará a prolongar su vida.
Para las fresas, prepara una solución con 10 partes de agua y 1 parte de vinagre blanco o de manzana en una ensaladera. Sumerge las fresas, mezcla, drena y enjuaga. El vinagre eliminará las bacterias y el moho y la fruta durará unas dos semanas.
Una sugerencia fácil para las cebollas: en la despensa, mantenlas alejadas de las patatas. Los gases producidos por las cebollas hacen madurar las patatas más rápido. Lo mejor es combinarlas en la fase de cocción, por ejemplo dentro de una tortilla.