¿Harto de que el queso feta acabe en la basura?
Es acuoso, es frágil y es muy difícil de almacenar, por lo que la mayoría de las veces termina en la basura. Pero este distintivo sabor salado y textura desmenuzable puede agregar un delicioso toque especial a tus platos. Prueba esta receta de albóldigas de queso feta para un plato sencillo y sabroso.
Almacena las albóndigas crudas en la nevera, fuera del contacto con otras comidas. Sirve con pasta, o solo o como acompañamiento, y verás cómo puedes convertir un plato cotidiano en una forma de respetar la comida.
Precalienta el horno a 220°C. Desmenuza el queso feta.
Prepara tus ingredientes.
Mezcla la carne picada, el pan rallado, ajo, cebolla en polvo, huevo, pimienta y hierbas en un bol.
Mezcla bien.
Toma una cucharada de queso feta y usa la mezcla de carne para formar una bola alrededor de ella.
Hornea por 10 minutos y luego voltéalas, y cocina por otros 10-20 minutos hasta que estén doradas y completamente cocinadas por dentro. Deben estar alrededor de 70° en el centro. Sácalas del horno y cúbrelas con papel de plata durante 3-5 minutos.