Estos sabrosos crutones son una manera perfecta de convertir el pan duro en algo que te durará semanas, o incluso meses, y será un delicioso añadido para cualquiera de tus comidas. Desmenuza sobre sopas o agrégalo a tus ensaladas, y ¡verás cómo puedes evitar que tu pan duro se convierta en desperdicio!
Corta las cortezas de pan duro y luego córtalas en cubos.
Colócalas en un bol y mezcla en aceite de oliva, hasta que queden cubiernas pero no remojadas en aceite de oliva.
Agrega sal marina y pimienta.
Mezcla todo suavemente.
Hornea a 200°C.
Sirve y disfruta.