Las hierbas frescas pueden ser difíciles de mantener debido a su naturaleza delicada, y antes de que podamos darnos cuenta, se marchitan y tenemos que tirarlas.
Las hierbas tienen un sabor más concentrado cuando están frescas. Cuando maduran, pierden su sabor y textura. Preserva su sabor durante más tiempo preparando esta mantequilla de hierbas.
Usa estos cubitos para dar sabor a cualquier plato y minimiza el desperdicio de alimentos al mismo tiempo.
Derrite la mantequilla a baja temperatura.
Agrega el ajo picado y remuévelo.
Limpia las hierbas frescas e introdúcelas en el procesador de alimentos.
Pica las hierbas finamente.
Agrega las hierbas a la mezcla de mantequilla derretida y ajo.
Retira la mezcla del fuego y viértela en las bandejas para hacer cubitos de hielo.
La mantequilla de hierbas se mantendrá fresca alrededor de 7 días en el frigorífico, y se conservará de entre 3 a 6 meses si se guarda en el congelador.
Puedes usar la mantequilla de hierbas introduciendo los cubos directamente en preparaciones de pasta, guisos... en el momento de la cocción.