5 pasos para una cocina de desperdicio cero
Consejo — 03.10.2018

5 pasos para una cocina de desperdicio cero

Cada año, un ciudadano promedio de la UE desecha 16 toneladas de residuos. Dado que solo el 40% de todo lo que tiramos es reciclable, significa que se acumula una gran cantidad de basura en los vertederos. Desde el desperdicio de alimentos hasta el envasado excesivo, la cocina es una de las mayores fuentes de basura doméstica. Aquí encontrarás algunas recomendaciones simples con las que puedes reducir el impacto.

Di NO al plástico no reutilizable

Comienza comprando con bolsas reutilizables. Son más baratas, más resistentes y no tardarán en descomponerse 1000 años en un vertedero. Compra productos a granel y almacénalos en tu despensa en envases de vidrio, como por ejemplo la harina o la pasta. Conseguirás que se mantengan mejor, vestirán tus estanterías y, lo más importante, reducirán significativamente tus desechos de plástico.

Recicla de manera inteligente 

Piensa en el reciclaje del plástico como el último recurso, ya que muchas veces los plásticos reciclados se degradan y se convierten en bolsas de plástico baratas, que de todos modos acaban en el basurero. Opta por envases de vidrio o metal cuando sea posible, ya que pueden reciclarse sin perder la calidad. UTiliza envases reutilizables siempre que puedas. Esos viejos tarros de mermelada son excelentes recipientes para las sobras (y también, excelentes copas de cóctel).

Aprende a ahorrar conservando los ingredientes más frescos

Desde la congelación de la fruta hasta el escabeche de verduras y el secado de la carne, hay muchas formas de conservar los alimentos. Búscale un lugar en tu congelador, prueba un deshidratador o cocina las verduras y frutas menos que frescas para preparar una sopa o un batido. Si eres del tipo de persona que instintivamente tira algo a la basura cuando está blandito o ha pasado la fecha de caducidad indicada en la etiqueta, intenta experimentar con recetas sencillas para evitar desperdiciar ingredientes. Si realmente algo está pasado, ten preparado un contenedor de compost.

 

Compra menos, consume local

Los supermercados están diseñados para animarnos a comprar mucho de una sola vez, y eso es una gran causa de desperdicio de alimentos. Busca tiendas de cosecha local y visítalas regularmente para obtener productos frescos como frutas, verduras, pan y carne. Es más fácil encontrar productos de temporada baja, lo que significa productos más frescos y cargados de nutrientes. También mantiene el dinero en tu círculo de economía local. Abre tu elección a la compra de frutas y verduras de aspecto extraño que, de lo contrario, podrían desperdiciarse. Dado que la crianza de carne tiene un gran impacto ambiental, considera reducir su consumo y comprar productos orgánicos. Si eso te lleva a rebasar el presupuesto, te recomendamos que establezcas una buena relación con tu carnicero local, ya que generalmente pueden recomendar cortes menos populares que te ahorrarán dinero (y que significa menor desperdicio de alimentos).

Sé creativo con las sobras y los residuos

¿Sabías que puedes volver a cultivar cebollas de primavera poniendo sus tallos blancos en un vaso de agua? ¿O que puedes usar cáscara de naranja para alejar a los mosquitos en verano? ¿Que puedes hacer que tus sobras de chips se pongan crujientes de nuevo en solo 10 segundos con la ayuda de un microondas? Si estás a punto de tirar algo, pregúntate (o también puedes consultar en Internet) si hay algo concreto que puedas hacer con eso. Puede que hasta te sorprendas.

También puedes encontrar numerosas y deliciosas recetas que aprovechan al máximo los ingredientes que te sobran, o consejos útiles para ayudarte a desperdiciar menos.

Fuentes: http://ec.europa.eu/environment/waste/index.htm