La calabaza entera
Mientras nos preparamos para la víspera de Todos los Santos, la calabaza tiene su oportunidad para brillar. Pero si bien las linternas en calabaza son excelentes para hacer que los niños del vecindario sepan que pueden venir a nuestra casa a buscar caramelos, también generan toneladas de desperdicio de alimentos.
Dado que no nos gusta que los alimentos deliciosos queden sin comer, aquí hay algunos consejos para aprovechar al máximo tus calabazas festivas.
No seas un cabeza de calabaza
El primer paso es ser inteligente al preparar tu linterna de cara de calabaza. Es probable que no puedas comer una calabaza que se haya dejado fuera durante más de 24 horas, pero si estás empeñado en esculpirla, prepárala para guardar la mayor cantidad posible de semillas y carne antes de sacarla a la puerta de casa.
Empieza por cortar la parte superior de la calabaza y saca las semillas: querrás quitar la membrana fibrosa y mantenerla a un lado para asarla. A continuación, usa una cuchara grande o una cucharada de helado para raspar la pulpa, hasta que alcances la capa interna blanquecina. No olvides guardar los restos que saques al hacer la nariz, la boca y los ojos.