A veces nos olvidamos de las frutas que compramos. Se olvidan en la nevera durante mucho tiempo y se dejan pudrir. En este punto, si las manzanas y plátanos han comenzado a madurar demasiado, tenemos recetas dulces riquísimas.
PARA LA MERMELADA DE MANZANAS: si las sobras de manzanas ya están cortadas, colócalas en una olla y hiérvelas en agua.
PARA LA MERMELADA DE PLÁTANO: Corta los plátanos y agrega el jugo de limón.
PARA MERMELADA DE MANZANAS: ponlas en un tamiz con un tenedor. Vuelve a colocar las manzanas tamizadas en la olla y agrega el azúcar. Hierve hasta que espese.
PARA LA MERMELADA DE PLÁTANO: agrega todos los ingredientes excepto el ron añejo y el extracto de vainilla en una olla y que hierva.
PARA LA MERMELADA DE MANZANA: Agrega el zumo del limón y continua hirviendo por un breve periodo de tiempo.
PARA LA MERMELADA DE PLÁTANO: Después de hervir, retira la mermelada de la olla y agrega el ron añejo y extracto de vainilla.
PARA LA MERMELADA DE MANZANA: Agrega canela al gusto. Ponlo en frascos y déjela enfriar. Una vez frio, cierra bien sus tapas y guárdalas en un lugar fresco y seco para disfrutar a tu gusto.
PARA LA MERMELADA DE PLÁTANO: Pon la mezcla a través de la licuadora y deja que se enfríe. Tu mermelada está lista.