Ya has cocinado tu crema de calabaza y te preguntas ¿Qué hago con las semillas? Aquí tienes una receta para convertir esas semillas en una delicioso y nutritivo snack.
Calienta el horno a 180 C. Cubre una bandeja para hornear con papel vegetal.
Llena una cacerola mediana con aproximadamente 2 tazas de agua y sazona con 2 cucharaditas de sal, déjalo hasta que hierva.
Mientras tanto, saca las semillas de la calabaza. Agrega las semillas de calabaza a un recipiente lleno de agua fría y agítalas hasta que las semillas floten y estén casi limpias.
Agrega las semillas limpias al agua hirviendo con sal. Cocina a fuego lento durante 5 minutos. Escurre y retira cualquier resto de calabaza adherida a las semillas.
Esparce las semillas en paños de cocina limpios y sécalos. Amontona las semillas secas en la bandeja para hornear. Agrega el aceite y las especias en la parte superior y luego remuévelo hasta que estén bien cubiertas. Esparce las semillas en una capa. Hornea, revolviendo las semillas al menos una vez, hasta que estén doradas por los bordes, unos 10 a 25 minutos, según el tamaño de las semillas.